Por las Marismas del Conde (Rubayo)

Ayer por la mañana encaminé mis pasos hacia las Marismas del Conde, en Rubayo, a las cuales me dirigí en bicicleta. Una buena manera de desplazarse entre diferentes puntos de observación : silenciosa, ecológica, deportiva .... está bien esto del "birding-bike".

Tenía curiosidad por ver la situación de la pareja de Alcaudón Dorsirrojo que observé meses atrás y que utiliza para su nido un Espino Albar de dimensiones considerables que hay en la zona. La suerte me acompañó y dí con la mencionada pareja y un juvenil.

El macho se mostró en todo momento muy esquivo y alejado del punto que elegí para la observación, pero la hembra y el juvenil se mostraron un poco más tranquilos (no mucho más la verdad) y durante un buen rato estuve disfrutando de las llamadas del último pidiendo comida y de los aportes que le hacía la madre ocasionalmente. A la vez y en un prado muy cercano al que me encontraba una Codorniz dejaba oir su reclamo continuamente.



Hembra y juvenil de Alcaudón Dorsirrojo



Juvenil de Alcaudón Dorsirrojo

Un rato después me dirigí a la zona de marisma, que se mostraba de lo más animado. Pude contar al menos 85 individuos de Zarapito Real alimentándose en el intermareal. Quizás hubiese más, pero me fue complicado el conteo debido a que una pareja de Milanos Negros cicleaba sobre los zarapitos haciendo que levataran el vuelo y se dispersaran por diversos puntos.

También pude ver una veintena de Ostreros, unas diez Garcetas Comunes, una Gaviota Sombría y un buen número de Gaviotas Reidoras entre las que se distinguían varios juveniles.







Fotos que muestran el aspecto que presentaban las marismas

Ya de vuelta en un Sauco cercano al camino una familia de Tarabillas Comunes (una pareja con tres juveniles ) se movían de rama en rama y de vez en cuando hacían un picado sobre un prado cercano a la caza de bichos. Me senté un buen rato cerca y aunque en un principio se mostraban desconfiados al cabo de un rato los tenía a no más de tres o cuatro metros de donde me encontraba.











Tarabillas Comunes


Al cabo de un rato hicieron acto de presencia una pareja de Zarceros Comunes en el mismo árbol en el que se encontraba la familia de tarabillas. No les debió de hacer mucha gracia a éstas últimas porque emprendieron una cadena de ataques contra los zarceros, pero lo aguantaron de manera estoica y de allí no se fueron.










Zarceros Comunes

Y para finalizar la jornada en la carretera de Hoznayo un solitario ejemplar de Garcilla Bueyera alimentándose entre unas vacas. La diferencia con el plumaje invernal, con las tonalidades anaranjadas que presenta en el penacho y el manto, es palpable.





Esto es todo de momento. Un saludo a tod@s

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